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Aunque no tiene nada que ver con la línea habitual del blog, he querido publicar esta carta que me envían por correo electrónico porque me ha parecido muy interesante. Antes de hacerlo he buscado un poco por la Red y he visto que también sale publicada en elmundo.es , entre otras páginas, lo que me permite suponer su autenticidad. Cada cual es libre de opinar lo que quiera pero creo que esta señora pone los puntos donde hay que hacerlo. Carta de una médico a la Ministra. Señora ministra de Sanidad, escúcheme usted Por Mónica Lalanda: 9 de septiembre de 2009.- Señora ministra, le propongo que sea usted la primera española que se vacune contra la gripe A . De hecho, con este despropósito llamado autonomías, si se vacuna usted y toda la cartera de gente que nos gobierna en España, el grupo control sería lo suficientemente grande como para sentirnos todos más seguros. Verá usted, le agradezco que me haya colocado a la cabeza de los grupos de riesgo y que tenga usted tantísimo inter

Después de un mes de agosto para olvidar en lo personal y en lo profesional, vamos a retomar las buenas costumbres y echar un vistazo a la riqueza creativa de la publicidad en su cara más sensual. Estas imágenes se explican solas, así que, por hoy, no hay comentarios. Y el viernes que viene, más.

Bienvenidos a todos, "Oficialmente" hoy nos reincorporamos la mayoría al trabajo. No se nota mucho porque los teléfonos están bastante silenciosos. Debe ser que hay que revisar los correos, contar las vacaciones y los días que quedan hasta el fin de semana porque ganas de currar debe haber pocas. Yo, en cambio, me he pasado aquí casi todo el mes de agosto para dar salida a trabajos que llevaban meses pendientes de pequeñas correcciones por parte de los clientes. Son ganas de fastidiar porque mis vacaciones han sido de solo 5 días y me temo que ahora en septiembre volveré a estar de brazos cruzados. Perra vida la del autónomo en tiempos de crisis: todo el año con poco trabajo y cuando llega el momento de tomarse unos días libres de verdad, los clientes se acuerdan de que hay temas pendientes y los quieren resueltos para cuando ellos vuelvan de sus vacaciones. En fin, tampoco puedo quejarme porque tal como están las cosas todo el trabajo es bueno. Pero fastidia que te pidan en